La Finca Palmeretes y la Ermita del mismo nombre figuran desde hace años en el Catálogo Municipal como bienes protegidos del municipio, pero lo cierto es que la degradación y la falta de mantenimiento habían convertido el lugar en foco de insalubridad y riesgo potencial para las fincas colindantes en caso de propagación de un incendio.
La propiedad y por tanto la responsabilidad de conservación y mantenimiento corresponde a LIBERBANK S.A. como establece la Ley Urbanística Valenciana que regula la obligación legal conservativa del propietario. Los actos vandálicos que se vienen repitiendo habían originado la degradación del entorno, así como el expolio de la finca, lo que unido a la ausencia total de cuidado por parte del propietario amenazaban con abocar a este bien patrimonial de Sant Joan a la desaparición.
Desde el año 2012 el Ayuntamiento venía apercibiendo a la empresa propietaria para que cumpliera con las obligaciones que por ley le corresponden para con el patrimonio histórico. Al no haberse obtenido respuesta, ni haberse constatado actuaciones en la línea de lo que establece la legislación vigente en materia de bienes patrimoniales, una vez concluido el plazo que marca la ley es el Ayuntamiento el que ha tenido que intervenir, con el propósito de frenar el deterioro y abandono de la finca.
Las labores han ido encaminadas a trabajos que pretenden garantizar las condiciones de seguridad, salubridad, ornato público y decoro, consistentes en el desbroce y limpieza de las parcelas, así como la reparación de los vallados y muros, además del cegamiento de las puertas de acceso y los aljibes. El importe total de las actuaciones asciende a 9.260,60€ que al tratarse de una ejecución subsidiaria deberá asumir la empresa propietaria.
Asimismo desde el Ayuntamiento se indica que con independencia de los trabajos realizados, se va a instar al propietario para que aporte un informe emitido por técnico especialista al respecto del estado de los inmuebles catalogados. La utilidad de dicho informe es fundamental ya que según señala el concejal de Patrimonio, David Aracil, «ello puede permitir la ejecución de obras adicionales a las ya realizadas, para garantizar el mantenimiento y conservación de la Finca y la Ermita».