Desde la Concejalía de Limpieza y Mantenimiento dirigida por Eva Delgado, continúa con la limpieza y protección de la ermita tras la aparición de nuevos grafitis.
Según el informe técnico emitido por la empresa restauradora, en esta intervención se han eliminado esprays y pintura plástica, la cual se encontraba en gran cantidad en la fachada. La ermita sufre el desgaste provocado por anteriores ataques vandálicos, debido a que los pigmentos de la pintura de los grafitis han penetrado en el enlucido que reviste las paredes.
El proceso que se ha realizado ha consistido en pulir el material para eliminar las pintadas existentes, sin ocasionar una erosión mayor en la superficie que no provoque irregularidades visibles en el aspecto de las paredes. Con esta protección, se podrán retirar fácilmente las pintadas que aparezcan durante cinco años.
Las medidas para homogeneizar el aspecto de todas las paredes exteriores, afectadas también por la acción atmosférica, son enlucir nuevamente la ermita y proteger el material para facilitar la limpieza en caso de que aparecieran nuevas pintadas.